El jazz (3) Estilo Chicago
El Jazz (3)
Juan Pedro Calvo
Estilo Chicago
Con el cierre de Storivylle todos los grandes músicos de Nueva Orleans emigraron a Chicago, incluso mucho antes del masivo traslado ya habían efectuado tournée por la ciudad del norte de los rascacielos, músicos como Joe King Oliver, Papa Mutt Carey, Jelly Roll y otros muchos, quedándose encantados y viendo en aquella ciudad el futuro del jazz.
Fue en 1918 cuando Chicago acogió a estos músicos de Nueva Orleans, eran días de juego y gangsterismo. El pionero fue Tom Brown que cuatro años antes se había anticipado con un grupo blanco consiguiendo introducir este estilo entre los ciudadanos de Chicago.
No habían transcurridos un años desde que llegó Tom, cuando en Chicago se formó una banda bajo la dirección del conocido John Stein con el nombre Stein Dixie Jazz Band, que debido a sus escasos ingresos desapareció prematuramente, formándose posteriormente la Original Diexeland Jazz Band. El término Dixie que aparecerá en varias ocasiones se remonta a tiempos anteriores al jazz, cuando en Nueva Orleans se emitió una serie de grabaciones por diez dólares que llevaba impresa la palabra «dixie». Desde entonces mucho lo utilizaron para referirse como referencia al estilo Nueva Orleans. Con el tiempo se convirtió en una referencia del sonido de todos los estados del sur.
Los músicos blancos utilizaron el término «dixie» para referirse a la música que hacían y su procedencia. El primero que lo utilizó fue Jack Papa Laine. Como explicación final a este término y su significado, que al final se convirtió en todo aquello que tuviera referencia o tratara del jazz tradicional. Era algo así como la oposición del sonido jazzístico de los blancos a la música de los negros generada en la ciudad de Nueva Orleans.
El debut de la Original Diexeland Jazz Band tuvo lugar en 1916, dos años antes de la gran invasión de músicos procedentes de Nueva Orleans, fue en el Hotel Normandy consiguiendo una gran repercusión en la ciudad. Poco tiempo después y debido a las desavenencias interiores, unido a los problemas económicos el grupo cambió su formación inicial, siendo con el clarinetista Larry Shiels cuando se produjo la composición definitiva. Con esta nueva formación comenzaron las grabaciones de los primeros discos del grupo. Para aprovechar aquellos momentos de esplendor, las compañías discográficas Columbia y RCA Victor llevaron a sus estudios a la orquesta dejando masteres de una gran belleza. En pleno éxito y como banda ya reconocida, la Original viajó a Inglaterra para participar en el show de Joy Bells, pasando por numerosos locales londinenses, pasando antes de volver a los Estados Unidos por Paris, obteniendo un gran éxito.
La vuelta a Nueva York estuvo marcada por una nueva remodelación del grupo. Es a partir de este momento donde la banda comienza a decrecer en popularidad e imaginación, apenas unas cuantas grabaciones y numerosas actuaciones hasta prácticamente desaparecer en 1937.
El estilo Chicago era mucho menos fogoso que el de Nueva Orleáns, pero su concepción mas elegante y refinada, estaba llena de pasión y sencillez. Fue un perfecto mensaje musical muy bien engranado en el que poesía y ritmo se complementaban eficazmente.
Aunque no fueron precursores de este estilo, la New Orleans Rhythm Kings superó en perfección a la Original, sustituyéndolos en su largo periplo europeo. Los nombres mas destacados de esta banda procedente de Nueva Orleans fueron su clarinetista Leon Rappolo y su trombonista George Brunies.
Al igual que ocurriera con la Original enseguida enseguida les llovieron decenas de ofertas para grabar discos. En la ciudad de Richmond grabaron en 1922 para la compañía Gennet siete matrices, Oriental, el impresionante Farewell Blues, Discotented Blues, Bugle Call Blues, Tiger Rag, Panamá y Eccentric.
Tres años después y debido a la falta de recursos la estupenda banda de Rappolo y Brunies se vino abajo perdiéndose en los locales de Chicago con el único ánimo de subsistir.
La aparición den excelentes músicos dio movilidad y agilidad al entusiasmo popular de Chicago. La figura de Leon Bismarck Beiderbecke sobresale de manera especial entre tanto músico mezclado. Bix (como se le conocía) fue una figura polémica, inmejorable para muchos y menospreciado para otros. Su música llegó a sorprender a sus mas significativos seguidores, produciendo incluso en el grupo la inseguridad de las verdad de Bix. De fuertes contrastes Bix tan pronto y en un momentos de inspiración llegaba a situaciones de monstruo sagrado, como ofrecía una pobre exposición artística de lo que debía ser la música. Su snobismo y su adición a la bebida le llevaba frecuentemente a grandes jaleos en sus conciertos, convirtiéndose en un ser grosero e irreverente, siendo a pesar de todo seguido por sus incondicionales.
Bix nació en Beiderbecke en 1903. A los tres años ya tocaba el piano, a los quince tocaba la trompeta como autodidacta. Fue a este instrumento al que se dedicó cuando escuchó a La Rocca, primer inspirador de Bix, poco después consumía todo lo que veía de King Oliver y Louis Armstrong. En Chicago fue alumno de la academia de Lake Forrest, dedicando sus ratos libres a la audición en directo de mísocps como Oliver, Noone y Dodds.
Una vez terminado sus estudios deambuló por numerosas formaciones, hasta que fue contratado por la orquesta compuesta por Al Gander al trombón, George Jhonsonh al saxo tenor, Jimmy Hartwell al clarinete, Bob Gillette al bajo y Vic Bertón a la batería. Con esta formación grabó Bix sus dos primeros discos con los títulos de Jazz Me Blues y Fidgety Feet.
Mientras la fama de Bix y su banda crecía, el extravagante e inconstante trompeta pensaba en su marcha del estado de Indiana. En 1924 y después de unos años fuera volvió a Chicago integrándose en la roquesta de Charlie Strainght, donde apenas duro un año para pasar a la formación del saxofonista Frankie Trumbauer convirtiéndose junto a Hoagy Camirchael en sus mas fieles amigos. En 1926 Bix recibe una oferta tentadora de de Jean Goldkette, con el este grupo graba discos y temas como Im Comin, Virginia, Sinnginng The Blues y Clarinet Marmalade, ejemplos incuestionables de lo que era un estilo de negros interpretado y adaptado por blancos.
Con la banda disuelta Bix y Trumbauer pasan a formar parte de la banda de Paul Whiteman, músico que por entonces gozaba de un reconocimiento y popularidad. Sus permanentes espantadas y sus borracheras cada vez mas frecuentes hacen que Paul le dé un descanso. Bix había perdido parte de su fuerza y ya no volvería a reaccionar. Una pulmonía contraída una noche en Princetown en 1931 lo llevó definitivamente a la tumba.
Con Bix el jazz de Chicago pierde uno de sus importantes músicos, no siendo reflejado el hecho en sus grabaciones y reconocimientos. Su desaparición de forma prematura tampoco ayudó a descubrir todo lo que Bix pudo haber dado de sí. Su originalidad como fuente creativa no pudo desarrollarse hasta donde de él se esperaba, pero todos los que le conocieron recordaran sus extraordinarias interpretaciones cuando estaba en vena de inspiración.
La historia del jazz de Chicago nos trae el recuerdo de un gran colaborador de Bix, Frank Teschemacher, nacido en Kansas City en 1906. Comenzó tocando con Jimmy McPartland, ambos formaron un grupo bajo el apelativo de los New Orleans Rhythm Kings (mencionados anteriormente). Después de un largo periodo de grandes éxitos cambiaron su nombre por el de Husk O´hara Wolverines, consiguiendo un contrato con famosa sala de baile de Chicago White City. En el mismo local tocaba otra orquesta en la que estaba el gran concertista Muggsy Spanier, nacido en la misma ciudad de Chicago en el año 1906. Al terminar sus contratos en la sala las dos orquestas se disolvieron formando un nuevo grupo Teschemacher y Spanier, con el faboloso Jess Stacy al piano, Floyd O´Brian al trombon y George Wettling a la batería, deambularon por todos los locales de la ciudad hasta que conocieron a Red McKenzie, ex disk jockey y un amante apasionado del jazz que por aquel entonces tocaba un instrumento originalísimo, se trataba de un peine recubierto de seda y era leader de un grupo llamado Mound City Blue Blowers. Teschemacher consiguió unirse al grupo de Red y grabar una serie de canciones entre las que cabe destacar China Boy, la popular Liza, Nobodys Sweetheart y Sugar, todo ello bajo la denominación como grupo de la MCKenzie and Condon´s Chicagoans.
Después de de algunas grabaciones mas en compañía de Spnanier y McKenzie, «Tesch» y en pleno declive circunstancial del jazz en la ciudad de Chicago, al igual que lo hiciera Bix, se unió a bandas comerciales sin demasiadas pretensiones. A pesar de todo aún consiguió grabar algunos discos más que pusieron de manifiesto, una vez más, el enorme talento jazzístico de Tech, hasta que en 1932 y una vez solo se unió a Wild Bill Davison, un buen trompetista de la época que nunca llegó a excepcional. Fue precisamente con Wild y yendo en su coche hacia el trabajo, cuando fue embestido por un camión pereciendo en el acto, contaba tan solo 26 años habiendo llegando a pesar de su edad a su plena madurez artística. Con la muerte de Tesch y Bix Chicago se vio privado en menos de un año de dos de sus mejores jazzman.