Sanidad quiere acabar también con el «tabaquismo de tercera mano» de colillas y partículas
25 de Abril 2024/Agencias
Salud Pública ha remarcado este miércoles que en plan contra el tabaquismo no solo busca una mayor restricción al tabaco para reducir el número de fumadores o aumentar los espacios sin humo, sino también acabar con el «tabaquismo de tercera mano» provocado por partículas de colillas debido a los perjuicios demostrados sobre la salud, principalmente en niños.
Así lo ha puesto de manifiesto el director general de Salud Pública y Equidad del Ministerio de Sanidad, Pedro Gullón, en la Comisión de Sanidad del Congreso, en la que ha explicado que el denominado «tabaquismo de tercera mano» proviene de partículas que se quedan suspendidas o adheridas cuando la gente tira colillas al suelo y también provoca daños ambientales.
Ha incidido en que este tipo de tabaquismo pasivo tiene «consecuencias en la salud humana» y ha puesto como ejemplo estudios en los que se han encontrado más de 250 químicos provenientes del tabaco en análisis de sangre y orina de niños.
Gullón ha insistido en que el plan 2024-2027 contra el tabaquismo goza de máximo consenso y consta de 5 metas y 23 objetivos, entre los que figura reducir por debajo del 5 % la prevalencia de consumo diario en los estudiantes y por debajo del 11 % en la población general, con una primera meta: «Que la gente no se inicie en el consumo de tabaco».
Y en esta lucha contra el tabaquismo, ha desglosado una batería de datos para esbozar la necesidad de un enfoque «integral» contra el tabaco que aborde cuestiones comerciales como la publicidad o el empaquetado, asuntos que no ve fáciles por la presión y conflictos de intereses de la industria del tabaco.
Sobre ello, ha avisado Gullón de que el nuevo plan contra el tabaco se dedicará a «contrarrestar las presiones de una industria que se dedica a vender veneno y muerte».
En datos, el tabaquismo, ha dicho, mata a 150 personas al día y representa aproximadamente un 20 % de la carga de la mortalidad total en España, de forma que 1 de cada 5 muertes se deben al tabaco.
Asimismo, ha proseguido Gullón, es la primera causa de pérdida de años de vida y de vivir con menos salud, mientras que el 8 % de la población está expuesta al «tabaquismo de segunda mano», que provoca unas mil muertes al año.
Estrategia coordinada para dejar de fumar
El responsable de Salud Pública ha destacado que algunas comunidades autónomas cuentan con estrategias «muy efectivas» para que la población deje de fumar, pero ha lamentado que no haya un enfoque común en todo el territorio, por lo que quiere que las experiencias de las distintas autonomías puedan extrapolarse al resto.
Desde Sanidad, ha asegurado, se trabajará para esa coordinación con el fin de que las comunidades compartan información en la prevención y control de tabaquismo.
Vapeadores y cigarrillos electrónicos
Gullón ha recriminado que la industria tabaquera hable de «estrategia de reducción de daños» al intentar sustituir el tabaco por nuevas modas de fumar como los vapeadores o cigarrillos electrónicos y ha considerado este eslogan «un insulto a la salud pública».
Ha recordado, además, que las encuestas estudiantiles arrojan que más de un 55 % de los estudiantes habría probado alguna vez uno de estos dispositivos, lo que aumenta hasta tres veces la probabilidad de que comiencen a fumar cigarrillos.