¿ESPERAREMOS A SEPTIEMBRE?

Por Salvador Barnes. Periodista.

Hay que ser,( como se dice en Canarias) «muy tolete» para saber cada día cómo se nos torea y de salón para que el entregado ciudadano español y sin darse cuenta acepte casi por imperativo la corrupción que cada día se nos sirve ya en el desayuno . Todo esto es para no acusar y aceptar por verdad bulos, sabiendo ( como se sabe) que casi todo el Gobierno, presuntamente parece que esté implicado en alguno de estos menesteres corruptibles, que igual se puede hacer por omisión que por acción. Hay un escandaloso «guirigay» entre estos cerebritos que nos representan, e incluso se exhiben documentos probatorios y acusatorios entre aquellos mal llamados compañeros políticos que como se sabe han untado el pan en esa corrupción que no cesa, y que están demostrando infinidad de veces que entre otras cosas, tampoco saben ponerse de acuerdo en cosas tan vitales como tener una gobernabilidad acorde con las exigencias de la ciudadanía.
Son tantos casos que vemos de desidia, que entendemos que el pueblo este como aletargado, abúlico, agotado de hacer cada fin de mes el mismo recorrido de todo los anteriores ya que no se llega hasta fin de mes y tienen que ir muchas de estas familias a la cola de Cáritas o a los comedores públicos para acabar el mes, todo porque el dinero del trabajo del «pobre» empleado no le estira para acabar el mes y se sumerge como tantos y tantos españoles en el umbral de la pobreza más severa. ¿ Solo nos interesa saber, si alguien tiene en proyecto frenar esta vergüenza?.
Es triste sopesar nuestra forma de vivir, esta confusa hasta para el turismo, que dice que somos un País dicharachero y derrochador. Pero estamos lejos de lo que a estos extranjeros en su País les hacen, aquí nadie que se sepa nos defiende, por muchas arengas que nos digan, todo es una escatológica puesta en escena de una comedia que siempre acaba en tragedia. La verdad es que cada vez tenemos menos derechos y más obligaciones. La sanidad está en precario, la educación como el «trile» a ver en qué cubilete está la bolita de la educación. Hay demasiada confusión de valores, y la ética está de vacaciones, el respeto, la moralidad y el acatamiento a la Leyes, todo no las cumplen, solo vemos ineptos en muchos escaños que los ocupan los que se llaman políticos, que defienden solo su nomina y su propio «status».
Septiembre, creemos firmemente que será el mes de la esperanza, por lo menos para una gran parte de la España española, esa que quiere el español con sentido común y que trata de hacer ver a aquellos que siguen estando ciegos lo que tenemos, que con todas estas tropelías que se nos hacen estamos tocando fondo con una gran detrimento para todos si nadie hace nada por solucionarlo.

Salvador Barnes