Guaguas Municipales reflexiona sobre el reto de la gratuidad en el transporte público, que demanda solidez y flexibilidad en la gestión del servicio

La compañía municipal expone las claves del proceso, tras 20 meses de gratuidad, con cifras récords de viajeros, que apuntan a más de 50 millones de clientes al finalizar este año

Los intervinientes han destacado la capacidad de Guaguas Municipales de adaptarse al reto tras un gran esfuerzo por parte de los trabajadores y trabajadoras

Las Palmas de Gran Canaria, 19 de Septiembre de 2024. Guaguas Municipales utiliza el foco de la Semana Europea de la Movilidad para reflexionar sobre el reto de la gratuidad en el transporte público, que demanda, a partes iguales, solidez y flexibilidad en la gestión de los recursos y en la prestación del servicio. La gratuidad se implementó en enero de 2023 –hace 20 meses- y, desde entonces, la compañía de transporte ha experimentado un incremento extraordinario de viajeros, que la llevará a romper la barrera de los 50 millones de clientes al finalizar este año.

El director general de Guaguas Municipales, Miguel Ángel Rodríguez, ha ofrecido este miércoles, en una charla celebrada en el Gabinete Literario, algunas claves del proceso de gratuidad y su influencia en el día a día de la operadora pública de transporte, que también están recogidas en una publicación que se puede consultar en la página web corporativa guaguas.com.
“Como siempre, y tras un gran esfuerzo por parte de sus trabajadores y trabajadoras, Guaguas estuvo a la altura del reto”, destaca en este documento el presidente de la empresa y concejal de Movilidad del Consistorio capitalino, José Eduardo Ramírez, al tiempo que subraya que “los recursos económicos destinados a mantener esta medida siguen siendo insuficientes, provocando el tensionamiento de las operadoras y forzando a las propias empresas y a las administraciones locales e insulares a asumir de forma injusta parte del coste de la misma”.
Para el análisis de la situación, después de poner en contexto a la audiencia sobre cómo se produjo la irrupción de la gratuidad, el director general de la compañía, Miguel Ángel Rodríguez, ha desgranado el proceso de estos últimos meses bajo el paraguas de cuatro perspectivas estratégicas para la sociedad municipal: clientes, personal, economía y flota, a las que ha acompañado con unas conclusiones finales.
Nuevos públicos
“Se ha abierto una ventana de oportunidades para que nuevos públicos prueben nuestro servicio”, enfatizó Rodríguez a la audiencia, al tiempo que reveló que cada vez llegan más comentarios de ciudadanos que aparcan su coche y, llamados por el efecto de la gratuidad, realizan sus trayectos en transporte público colectivo. “En la hipótesis de la finalización de la política de gratuidad, estos nuevos clientes podrían permanecer en el sistema porque ya han probado sus ventajas”, convino.
En la misma línea constructiva, el gerente de Guaguas Municipales puso de relieve que la política tarifaria ha cumplido los objetivos de “promocionar el transporte público y aliviar la economía de las familias que han hecho uso de los bonos gratuitos”, aunque evidenció que “la alta ocupación de las guaguas sin una ampliación adecuada de recursos, tanto humanos como materiales, dificulta el mantenimiento de altos niveles de calidad como pueden ser la frecuencia, la puntualidad, la velocidad comercial o el confort de los usuarios”.
Durante su intervención, en clave financiera, Rodríguez puso el acento en que la empresa de transporte se encuentra expuesta a una “mayor dependencia” de las subvenciones de las Administraciones Públicas, que gestionan la política de gratuidad, en detrimento de los ingresos propios provenientes del copago de diferentes títulos de viajes, que generaban “un mayor grado de autonomía a la empresa, lo que puede generar incertidumbre en tesorería”.
Sin despegarse del argumento económico, el director general ha aprovechado para recordar que previo a la política de bonificaciones y gratuidad, las tarifas pagadas por los viajeros aportaban menos de la mitad de los costos de funcionamiento de la red de transporte, ya que en mayor proporción estaba subvencionada por las Administraciones Públicas. “Este copago permitía disponer de recursos adicionales para realizar inversiones que mejoraran el servicio”, ha detallado.
“Ingredientes como la flexibilidad y el talento son necesarios para cambiar de rumbo cuando las circunstancias lo requieren y, ciertamente, nos ha costado navegar en este ambiente porque nos hemos enfrentado a contextos inéditos y de alta presión”, ha formulado Rodríguez, quien a modo de aprendizaje precisó: “hemos comprobado que necesitamos cultivar una nueva actitud ante este tipo de desafíos”.
fotografía realizada por Eros Santana