Suárez (CC) avanza subidas en al menos tres impuestos para 2025 y pone en duda que el Ayuntamiento apruebe su presupuesto antes del 31 de diciembre

10 de Octubre 2024

-El Ayuntamiento capitalino recuperará la tasa de basura, aumentará el recibo del agua y con toda probabilidad llevará a pleno una modificación de la ordenanza del IBI

 

El portavoz de Coalición Canaria (CC) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, David Suárez, ha afirmado que “difícilmente” el grupo de gobierno podrá aprobar el presupuesto de 2025 antes de que acabe el año, tal y como marca la ley, lo que el Concejal de Hacienda, Francisco Hernández Spínola, achacó este miércoles a la ausencia de acuerdo en el Congreso para aprobar la senda de estabilidad y el techo de gasto.

 

Sin embargo, desde CC recuerdan que no son los únicos factores que afectarían para no sacar adelante los Presupuestos “en tiempo y forma”, sino que existen otros como la ausencia de Coordinador General de Economía y Hacienda, que se ha mantenido en su responsabilidad menos de un año, o la parálisis que vive el Ayuntamiento por la falta de medios humanos.

 

“El nuevo presupuesto, cuando se apruebe, traerá sorpresas desagradables para los vecinos”, explica Suárez, quien recuerda que al menos tres tributos municipales experimentarán subidas. En primer lugar el gobierno municipal (PSOE, Podemos y NC) ya ha anunciado que recuperará la tasa de basuras, en virtud de la aplicación de la Ley Estatal de Residuos y Suelos Contaminados.

 

“Hacía 40 años que los vecinos de la capital grancanaria no pagaban la tasa de basura y ahora se volverá a aplicar de forma generalizada”, explica Suárez, quien recuerda que el pasado año este grupo de gobierno ya modificó otro impuesto, el de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), que propició un aumento del pago para los propietarios de coches de entre 25 y 40 años.

 

Además de la tasa de basuras, prosigue Suárez, el PSOE ya ha anunciado que modificará el recibo de agua “bajo el criterio de quien más consume más paga”, pero para CC “hasta que no lo veamos reflejado en la ordenanza no nos fiamos un pelo, dado que estamos convencidos de que lo más probable es que les toque pagar a todos los residentes en nuestro municipio”.

 

Por si fuera poco, este mismo miércoles Spínola ha adelantado que su intención es llevar al pleno de octubre la modificación de la ordenanza del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el tributo que reporta mayores niveles de recaudación a la administración local. “Debemos esperar a leer qué modificación pondrán sobre la mesa, pero tampoco nos esperamos nada bueno”, afirma.

 

De esta manera, según Suárez, “se afronta una modificación sustancial del cuadro impositivo, en un momento en el que el Ayuntamiento no tiene precisamente problemas de tesorería ni de financiación de los servicios públicos. Y cuando los niveles de ejecución presupuestaria siguen siendo muy bajos, lo que demuestra que en 2023 el capítulo de inversiones no alcanzara una ejecución ni de un 25%, es decir, que solo se gastó 1 de cada 4 euros”. Desde CC se muestran cautos y harán una valoración definitiva una vez que pasen por el pleno cada una de estas tres modificaciones fiscales. “Los vecinos de la capital grancanaria deben estar preparados para un más que previsible aumento del recibo medio en sus impuestos”, finaliza.