Historietista, Marta Guerrero.
12 de enero 2025
MARTA GUERRERO, historietista:
“Estoy un poco harta de que se relacione a la Movida con la política, a lo más que llegamos fue a reivindicar la anarquía”
En la figura de la dibujante Marta Guerrero se da la inusual circunstancia de que vivió en primera línea y fue protagonista de los dos movimientos culturales más radicales de España de las últimas décadas. Con apenas 15 años formó parte de lo que se llamó la Movida madrileña y poco después se fue a vivir a una Barcelona marcada todavía por la contracultura, donde se integró perfectamente, permaneció 33 años y desarrolló su carrera en revistas como El Víbora.
Con el paso del tiempo se muestra “un poco harta” de que se haya relacionado a la Movida con la política porque en realidad asegura que fue un movimiento de adolescentes con ganas de crear “y a lo más que llegamos fue a reivindicar la anarquía, como filosofía de nuestro movimiento Punk”. En su caso recuerda que en aquel entonces “yo tenía muchísima inquietud, estaba estudiando Artes y Oficios, hacía mis primeros pinitos en el teatro y en el cine con gente como Jorge Berlanga, intentaba dirigir mis propias obras, participaba en decorados para grupos…” Considera que lo ocurrido entonces “no fue nada mediatizado por la política, simplemente que como siempre los políticos se aprovecharon de aquella generación conocida como baby boom y de ese fluir masivo de gente con ganas de crear. No tiene nada que ver una cosa con la otra”, indica.
Sobre el término “Movida” señala que lo pusieron los políticos, la prensa, los programas de televisión o radio, para calificarlo “pero nosotros simplemente nos sentíamos gente que vivía su momento”. Aconseja que para conocer lo que realmente ocurrió se vea el documental de una hora de duración, De un tiempo libre a esta parte realizado por Beatriz Alonso Aranzabal y un libro que se acaba de publicar llamado La Contramemoria de Maritxu Alonso sobre los grupos de mujeres en el punk de distintas generaciones. “Lo de la Movida fue una etiqueta que no quiero ni mencionar porque las etiquetas me ponen muy nerviosa”, dice.
Recuerda al Madrid de aquellos tiempos como una ciudad muy pequeña en la que se encontraban un montón de personas que tenían la misma inquietud, en los conciertos, en el cine, museos… Luego estaba el Rockola, que fue un centro neurálgico que los aglutinó a todos y les daba cancha para crear desde la base en la música, moda o en las obras de teatro. “Ahí fue donde conozco a Paloma Chamorro y a Pedro Almodóvar pero digo esto sin meterme en etiquetas porque no fui una chica de nadie, ni nada parecido. Estaba allí y era un elemento más de todos los muchos que conformamos aquel movimiento y sin los que éste no hubiera existido”.
Con el tiempo se ha reconocido su trayectoria, por ejemplo, con la exposición que en 2022 el Museo Reina Sofía dedicó a las pioneras, como Laura Vendetti, Isa Feu y ella misma.