La Policía Local intervino casi 300 prendas falsificadas en el Rastro el pasado domingo  

Los agentes destinados a la vigilancia y prevención dentro de este mercadillo capitalino identificaron a cinco personas por este presunto delito

Agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife realizaron dos intervenciones, el pasado domingo, en el popular Rastro de la capital tinerfeña. Fruto de este trabajo de vigilancia y prevención se incautaron casi 300 productos textiles de diversas marcas, en apariencia falsificados, y que se encontraban a la venta. Las dos acciones policiales se saldaron también con la identificación de cinco personas responsables de estos hechos y se procedió a la retirada de toda la mercancía, instruyéndose las oportunas diligencias al respecto.

El primero de los servicios policiales se desarrolló en un puesto que ocupaba un espacio en la calle Darias y Padrón, junto al puesto autorizado había otro anexo que no contaba con el permiso para su instalación. Los policías verificaron que estaban a la venta prendas deportivas de reconocidas marcas a precios muy inferiores a los habituales de mercado. En este tipo de casos se solicita a los vendedores que aporten las facturas por su adquisición, y al no hacerlo, se procede a la identificación de los mismos e incautación de la mercancía. Además, de las dos personas identificadas en este caso ninguno era titular del puesto en cuestión.

Una vez retirados los productos a las dependencias policiales, en unión a las personas investigadas, más tarde se personó en la oficina policial una tercera persona, una mujer que se identificó como la propietaria del puesto intervenido y de la mercancía, procediéndose también a su identificación.

La otra intervención se realizó, dos horas más tarde, en un puesto ubicado en la calle José Manuel Guimerá Gurrea, donde dos hombres regentaban un puesto en el que también se ofrecía al público ropa deportiva de marcas muy conocidas a unos precios demasiado reducidos. Preguntados por la procedencia de dichas prendas y si podían aportar una factura por su adquisición, ambos lo negaron. De igual manera se trasladó la mercancía a las dependencias policiales donde se realizaron las pertinentes actas de incautación y se contaron y reseñaron todas y cada una de las prendas intervenidas.

Todos estos datos se remitieron a las autoridades oportunas para que se determine las responsabilidades en este asunto.