ASG impulsa la accesibilidad de las víctimas de los casos de menores robados a los servicios de salud mental
El portavoz adjunto de Agrupación Socialista Gomera, Jesús Ramos, solicita a la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Esther Monzón, que articule las medidas que sean necesarias
Asegura que “las situaciones por las que han pasado estas personas generan un estrés emocional bastante alto, demandando por ello apoyo psicológico y, en algunos casos, psiquiátrico”
4 de octubre. El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Agrupación Socialista Gomera (ASG), Jesús Ramos, ha solicitado este jueves a la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Esther Monzón, que articule las medidas que sean necesarias para facilitar el acceso de las víctimas de los casos de menores robados a los servicios de salud mental.
Según aseguró, “las situaciones por las que han pasado estas personas generan un estrés emocional bastante alto, demandando por ello apoyo psicológico y, en algunos casos, psiquiátrico”.
Afirmó que, “sin embargo, muchas de las víctimas de estos casos, que por su sintomatología han sido diagnosticadas, encuentran dificultades para obtener la cobertura necesaria”. Por eso, ASG, atendiendo las demandas realizadas por el colectivo Sin Identidad, pide al Gobierno de Canarias que, a través de la sanidad pública, se les trate de dar una respuesta.
Jesús Ramos agradeció el trabajo llevado a cabo por otros departamentos del Ejecutivo canario para desbloquear que estas personas sean atendidas como se merecen.
En este contexto, lamentó que hayan tenido que “sufrir hechos tan graves como la sustracción metódica de menores para entregarlos en adopción a otras familias, bien como negocio o como represalia política en los tiempos de la dictadura”.
Unos hechos, dijo, que “han provocado que existan personas que llevan más de 50 o 60 años sin saber de quiénes son hijos, quiénes son sus verdaderos hermanos biológicos o nietos, y madres y padres a los que sustrajeron a sus hijos, o que los creían muertos hasta que tuvieron pruebas que demostraban que habían sido engañados y se quedaron con la duda o angustia de conocer qué había pasado realmente”.