China actualizará su red 5G a 5G-A y promoverá el desarrollo de la tecnología 6G

China actualizará su red 5G a 5G-A y promoverá el desarrollo de la tecnología 6G

24 de Noviembre 2024/Agencias
China ha emitido un conjunto de directrices para mejorar la infraestructura de datos del país, que incluye la actualización de su red 5G al estándar 5G-A y la promoción de la investigación e innovación relacionados con la tecnología 6G.

Con este proyecto, impulsado por la Administración Nacional de Datos (NDA) del gigante asiático, China equilibrará el despliegue de portales de comunicación en todo el país y ampliará sus canales de información internacionales por cable submarino y terrestre, informó en la noche del sábado la agencia oficialista Xinhua.

Estas directrices también buscan facilitar el “flujo libre de datos seguro, de bajo y a gran escala” en China, cuyo Gobierno alentará a las industrias y regiones del país a “explorar activamente la nueva infraestructura tecnológica” en aras de proporcionar un entorno de entrega de datos “eficiente y confiable”.

La red 5G-A, que ya se ha comenzado a desplegar en algunos distritos de Pekín y Shanghái, supera a la red 5G actual en términos de velocidad, latencia, escala de conexión y consumo de energía, logrando una velocidad de descargas de hasta diez gigabits por segundo y de un gigabit para cargas.

Durante los últimos años, China ha apostado fuerte por liderar el cambio tecnológico con inversiones en sectores como la supercomputación, el desarrollo de las redes 5G, la inteligencia artificial (IA), el almacenamiento en la nube y los macrodatos, la carrera espacial, la tecnología militar, las soluciones de vehículos inteligentes o las energías limpias, vistos como sectores que favorecerán su crecimiento en un momento de estancamiento económico.

Algunos de estos avances han levantado el recelo de Washington por su sospecha de que las empresas chinas colaboran con las Fuerzas Armadas del país asiático, lo que ha desembocado en la elaboración de listas negras a fin de evitar que el Gobierno chino adquiera o tenga acceso a tecnología desarrollada por individuos o empresas estadounidenses.