EE.UU. niega que un ataque aéreo estadounidense matara a dos médicos cubanos en Somalia

Estados Unidos ha negado que un ataque aéreo suyo contra Al Shabab

12 de Junio 2024/Agencias
Estados Unidos ha negado que un ataque aéreo suyo contra Al Shabab matara el pasado 15 de febrero a dos médicos cubanos retenidos por ese grupo yihadista en Somalia, tal y como aseguraron los terroristas, según un informe del Mando Militar estadounidense en África (AFRICOM) remitido a EFE este miércoles.

En el informe, el Ejército norteamericano confirmó que efectuó un bombardeo cerca de la localidad de Jilib (sur), donde supuestamente murieron los doctores, pero rechazó que ese ataque provocara su fallecimiento.

«El 17 de febrero de 2024, el comando recibió un informe de un medio de comunicación digital que indicaba que dos civiles murieron como resultado de una operación militar estadounidense en las cercanías de Jilib, Somalia, el 15 de febrero de 2024», afirmó AFRICOM.

«El comando completó una revisión de la información disponible y evaluó que el ataque aéreo estadounidense realizado el 15 de febrero de 2024 no provocó daños a civiles», concluyó el informe.

El pasado 17 de febrero, Al Shabab aseguró que dos médicos cubanos secuestrados por esa organización en 2019 murieron el día 15 de ese mes en un ataque aéreo del Ejército de Estados Unidos en Somalia, aunque ese extremo no ha sido confirmado oficialmente por las autoridades del país africano.

«El bombardeo aéreo, que empezó a alrededor de las 00.10 hora local (21.10 GMT), tuvo como objetivo una casa en Jilib y mató instantáneamente a Assel Herrera y a Landy Rodríguez, capturados el 12 de abril de 2019» en el norte de Kenia, aseguró el grupo yihadista en un comunicado.

Al Shabab señaló que «los cruzados estadounidenses llevaron a cabo múltiples ataques con aviones no tripulados en la ciudad de Jilib (…) matando a los dos prisioneros cubanos».

En el comunicado aparecía también la supuesta fotografía de uno de los doctores cubanos presuntamente fallecidos.

El cirujano Landy Rodríguez Hernández y el especialista en medicina general Assel Herrera Correa fueron secuestrados el 12 de abril de 2019 en la ciudad keniana de Mandera (noreste), fronteriza con Somalia y objetivo de ataques yihadistas en el pasado.

Aquel día, los dos galenos se desplazaban, como era su costumbre, en un convoy al hospital de Mandera protegidos por escoltas armados, cuando fueron interceptados tras un tiroteo en el que falleció uno de los policías que velaban por su seguridad.

En mayo de 2019, líderes tradicionales de Kenia y Somalia que viajaron a la región somalí de Jubaland, controlada por Al Shabab, para negociar en favor de los facultativos, confesaron haber visto a los doctores prestando asistencia médica a la población local.

Según los mediadores, los secuestradores llegaron a exigir 1,5 millones de dólares como condición para su liberación, informó entonces la prensa keniana.

Herrera y Rodríguez formaban parte de un contingente de un centenar de profesionales cubanos que llegaron en 2018 a Kenia en aplicación de un acuerdo bilateral para mejorar el acceso a servicios sanitarios especializados en el país africano.

Estados Unidos ha estado involucrado en operaciones militares contra Al Shabab, en cooperación con el Ejército de Somalia, desde al menos 2007.

Somalia vive una intensificación de las ofensivas militares contra el grupo terrorista después de que el presidente somalí, Hassan Sheikh Mohamud, anunciase en agosto de 2022 una «guerra total» contra los yihadistas.

Desde entonces, AFRICOM ha realizado numerosos ataques aéreos contra Al Shabab.

Al Shabab, afiliado desde 2012 a Al Qaeda, comete ataques a menudo en la capital, Mogadiscio, y otros lugares del país para derrocar al Gobierno central -respaldado por la comunidad internacional- e instaurar un Estado islámico de corte wahabí (ultraconservador).

El grupo controla zonas rurales del centro y sur de Somalia, y ataca también a países vecinos como Kenia y Etiopía.

Somalia vive en un estado de conflicto y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barre, lo que dejó al país sin gobierno efectivo y en manos de milicias islamistas y señores de la guerra.