El asesor de Puigdemont pide apartar al juez de Volhov: sus audios muestran que es parcial
04 de Julio 2024/Agencias
Josep Lluís Alay, asesor del expresidente catalán Carles Puigdemont, ha pedido de nuevo que se aparte al juez Joaquín Aguirre del caso Volhov sobre la supuesta injerencia rusa en el procés por falta de imparcialidad, esgrimiendo una conversación publicada por varios medios en la que afirmaría haber tumbado la amnistía.
Así lo ha solicitado Alay en un escrito presentado este miércoles en el juzgado, al que ha tenido acceso EFE, después de la querella por prevaricación y malversación que interpuso ayer contra el juez -que también firman Puigdemont y su abogado Gonzalo Boye-, en la que le acusa de investigar ilegalmente la supuesta injerencia rusa en el procés usando fondos públicos.
Alay ya intentó sin éxito apartar a Aguirre del caso Volhov después de que el juez hablara sobre la supuesta injerencia rusa en el procés en una televisión alemana, aunque la Audiencia de Barcelona determinó en junio pasado que no apreciaba un interés del juez en el caso «ni siquiera en el ámbito ideológico».
El asesor de Puigdemont ha vuelto a pedir de nuevo la recusación del juez, ahora añadiendo como argumento una supuesta conversación grabada al magistrado que el pasado lunes publicaron varios medios y en la que, tras presumir de haber tumbado la amnistía, asegura: «Al Gobierno le quedan dos telediarios alemanes. Y ya está. A tomar por culo».
«Me han dicho que ayer se tumbó lo de la ley de amnistía. Se tumbó por mí», afirmó Aguirre, según la grabación, divulgada por Canal Red, que por el contexto se debió producir el día siguiente de que el pasado 30 de enero Junts votara en contra de la ley de amnistía en el Congreso, por lo que se tuvo que reabrir el proceso parlamentario hasta su aprobación definitiva el 30 de mayo pasado.
«Claro, es que será la tumba, lo será. Al Gobierno le quedan dos telediarios alemanes. Dos. Y ya está. A tomar por el culo. Entonces, hay gente que se está situando ya, ha tomado partido, y el partido soy yo», agregó Aguirre, en otro audio que avanzó Canal Red, medio fundado por el exlíder de Podemos Pablo Iglesias.
«La judicatura no actúa así y cuando alguien en su nombre lo hace, debe ser apartado con la mayor agilidad posible porque lo que ha conseguido es poner en entredicho al conjunto de la judicatura en materia de aplicación de la Ley de Amnistía y en cuanto a la persecución del independentismo», asegura Alay.
Según el escrito, las manifestaciones del juez no solo acreditan su interés en el caso sino su «absoluta falta de imparcialidad y de decoro», en un proceso en el que ha «pergeñado» una estrategia de incumplimiento de la amnistía, lo que «hace ineludible» su apartamiento «definitivo» del caso.
Y es que, según el escrito, las manifestaciones que han trascendido del juez «no solo afectan a la debida imparcialidad» del magistrado, sino directamente a su función jurisdiccional.
«El recusado, sin duda, es soberano en su fuero interno para pensar, o no pensar, lo que considere más oportuno; pero aquí ya no hablamos de fuero interno sino de la externalización de sus ideas, sus planes y el uso político que pretende hacer de la presente causa para, de una parte, hacer caer al Gobierno central y, de otra, para ser él la única carta a jugar: ‘el partido soy yo'», afirma el recurso.
Para Alay, en una sociedad democrática sería «inasumible» pedir que los jueces, al igual que el resto de los ciudadanos, no tengan una opinión política e incluso una ideología concreta, pero a la vez lo que se exige de un juez es que no la haga pública «sin esperar las consecuencia legales, porque eso afecta a la imagen de imparcialidad que ha de tener toda persona llamada a enjuiciar».
«Cuando es sorprendido actuando como viene haciéndolo el magistrado recusado lo que corresponde es asumir las consecuencias dentro del marco legalmente establecido», insiste.
Por este motivo, pide al juez que admita el incidente de recusación y que se aparte del caso y sea sustituido por el magistrado que corresponda por turno.