El CIT Insular La Palma reclama mejoras en el mantenimiento y gestión de las playas
08 de abril 2024
El Centro Insular de Iniciativas Turísticas (CIT) La Palma ha emitido un comunicado solicitando una revisión y mejora del modelo de gestión de las playas en la comarca oeste de la isla, ya que considera que estos espacios “presentan graves deficiencias que afectan a la imagen y a la actividad de negocios locales”.
El representante de Turismo Activo del CIT Insular La Palma, Enrique Viña, ha destacado “la incongruencia de la situación”, señalando que zonas costeras en el Valle de Aridane, en fase de recuperación económica y con esfuerzos por consolidar una imagen de calidad, “carecen de servicios básicos como socorristas durante todo el año”.
Además, Viña señala que se mantienen banderas rojas incluso cuando el estado del mar es adecuado, debido a la falta de socorristas en las playas, y ha denunciado el cierre de servicios como baños y vestidores, así como la falta de accesibilidad para personas con movilidad reducida.
Los empresarios del turismo activo dentro del CIT Insular La Palma instan a los ayuntamientos a mantener el servicio de socorristas durante todo el año y “a comprometerse claramente con la generación de satisfacción entre visitantes y residentes”.
Entre las deficiencias señaladas por los empresarios se encuentra la necesidad de una limpieza integral de plantas invasoras como el “rabo de gato” (Pennisetum setaceum) en los accesos a las playas, enumerando emplazamientos costeros como ‘Charco Verde’, ‘Puerto Naos’, El Charcón, Playa Nueva-El Mangón, Los Tarajales y El Puerto de Tazacorte.
La patronal del CIT advierte que “esta situación refleja un preocupante desinterés por parte de las administraciones públicas responsables de la gestión de las playas”, que consideran “va en contra de los esfuerzos de las empresas turísticas y del sector en general por recuperar la actividad económica tras la erupción volcánica».
Además de los problemas mencionados, el CIT ha enumerado otros fallos en la gestión y mantenimiento de las playas, como cartelería informativa incorrecta y la detección de vertidos ilegales en barrancos y acantilados.