El pleno municipal de Granadilla de Abona aprueba la creación de los Consejos de Barrio

Se constituyen en cumplimiento de la Ley Canaria de Municipios que establece su obligatoriedad al tener una población superior a 50.000 habitantes

(4 de marzo de 2024).- El pleno municipal de Granadilla de Abona aprobó por unanimidad en su sesión ordinaria la creación y reglamentación de los Consejos de Barrio, en cumplimiento de la Ley Canaria de Municipios que establece su obligatoriedad al tener una población superior a 50.000 habitantes.

Estos instrumentos de participación ciudadana y de interlocución vecinal con la Corporación Municipal tienen como objetivo el fomento de la igualdad y la solidaridad entre los vecinos del municipio y sus diferentes barrios, desarrollando una cultura participativa que consiga integrar a los ciudadanos en la vida política y social granadillera. De igual manera, busca garantizar el derecho a la participación democrática manteniendo un espacio de debate, información y participación entre la Administración y los vecinos. Finalmente, fomenta la colaboración de las entidades de barrio entre sí, así como la de estas con la gestión municipal.

El responsable del área de Participación Ciudadana, Nacho Mendoza Morales, afirma que “la creación de estos Consejos de Barrio es una fantástica noticia para todos los granadilleros y granadilleras, que dispondrán de un nuevo órgano de participación que les permita ser escuchados y formar parte activa en el desarrollo de sus barrios.”

Las atribuciones de los Consejos de Barrio son de carácter consultivo e informativo, pudiendo emitir y formular propuestas y sugerencias, así como recibir información, en relación al funcionamiento de cualquier servicio o actividad pública, manifestando opinión sobre todo aquello que afecte a los intereses colectivos de los vecinos del barrio.

De igual manera, también podrán participar en la elaboración del presupuesto municipal aportando sugerencias y propuestas en su ámbito de actuación; realizar quejas, propuestas e informes que afecten al estado de los servicios municipales; remitir las aspiraciones del vecindario en cuanto a lo que a los servicios de carácter municipal que afecten al barrio se refiere o tomar posición en aquellos asuntos territoriales o temáticos que desarrollen otras administraciones y que tengan repercusión en el barrio.