Estar vacunado de la viruela en la infancia no exime de ponerse la de mpox, según estudio

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05 de septiembre 2024/Agencias
Un estudio internacional en el que ha participado un equipo del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha concluido que, ante la falta aún de pruebas de que haberse vacunado de la viruela en la infancia proteja de la mpox, la población para la que está indicada esta última debe inmunizarse.

El trabajo liderado por la OMS, en el que han intervenido científicas del Centro Nacional de Epidemiología (CNE) y del Área de programas de vacunación del Ministerio de Sanidad, junto con investigadores de Dinamarca, Francia y Países Bajos, ha analizado la posibilidad de una protección cruzada residual entre la vacunación contra la viruela en la infancia y la infección con el clado II de mpox, responsable del brote surgido en Europa entre 2022 y 2023.

«A las personas con alto riesgo de exposición se les debe ofrecer la vacuna contra la mpox, de acuerdo con las recomendaciones nacionales, independientemente de sus antecedentes de vacunación contra la viruela, hasta que se disponga de más evidencia», concluyen los investigadores, que urgen a hacer estudios similares con el clado I, que es el que ha desencadenado el actual brote en África.

La mayoría de los programas de vacunación europeos contra la viruela comenzaron a principios del siglo XX y se dirigieron principalmente a menores de 3 años, que algunos países complementaron con refuerzos en adolescentes y/o adultos jóvenes.

Esto, junto con la intensificación de la búsqueda de casos y el rastreo de contactos, condujo a la eliminación de la viruela en la Región Europea de la OMS en 1953; las altas coberturas se mantuvieron hasta mediados de 1960, después de lo cual la aceptación disminuyó rápidamente hasta principios de 1980, cuando la enfermedad fue declarada oficialmente erradicada.

La falta de vacunación desde esta década en la población europea, argumenta el estudio, que ha sido publicado en la revista Eurosurveillance, podría dar lugar a que una proporción cada vez mayor de personas sea susceptible al mpox y otros ortopoxvirus en África y otros lugares.

Aunque algunos estudios realizados en África en los años 80 apoyarían la hipótesis de que los programas de vacunación infantil contra la viruela proporcionaban cierta protección frente a mpox, ese efecto residual no está claro en la actualidad, subraya.

Para estimar la efectividad de la vacuna y llegar a esta conclusión, el estudio ha comparado el estado de vacunación frente a la viruela en la infancia en los casos de mpox detectados entre 2022 y 2023 en los nacidos en España antes de la década de los 80, cuando estaba indicada con la proporción de la población que la recibió según los archivos históricos.

El resultado de la comparación es una amplia variación en las estimaciones de la efectividad vacunal en los cuatro países analizados, que se mueve en una horquilla de entre el 42 % y el 84 %. La estimación conjunta de todos fue del 70 %.

A pesar de que este hallazgo podría sugerir que existe una protección cruzada residual, la realidad es que «existe una gran incertidumbre y heterogeneidad en las estimaciones específicas de cada país», por lo que no se puede condicionar la vacunación contra el clado II de la mpox a haber sido vacunado de la viruela de niño, concluyen.