Exdirector de El Jueves, Guille Martínez-Vela.

GUILLE MARTÍNEZ-VELA, exdirector de El Jueves:

“La portada de Urdangarín y la infanta fue una venganza por la que nos censuraron con los actuales reyes”

Guille Martínez-Vela es el padre de personajes que forman parte ya de los clásicos del cómic como Martínez El Facha o Makinavaja, aparecidos en la revista El Jueves que dirigió durante casi siete años. En estas etapa se enfrentó a polémicas por una portada sobre Urdangarín y la infanta Cristina la que fue su autor y que sirvió como una especie de revancha por la censura de otra anterior en 2007 en la que aparecían los actuales reyes. En esta ocasión el caso no llegó a los tribunales, aunque “dio mucho que hablar pero le cayó en gracia a casi todo el mundo, el ejemplar se vendió muy bien y la revista salió consolidada. Estuvo a punto de sentarse en el banquillo por una portada sobre el frustrado intento de independentismo de Cataluña del 1-O tras una denuncia del sindicado de la policía nacional.

También causaron mucho alboroto unas viñetas de miembros de Vox en plan La Pandilla Basura (La Pandilla Voxura), que publicaron en la revista y meses después en la web. Circularon mucho por redes y desde la cuenta de Twitter, actualmente X, de Vox “cargaron contra nosotros y llegaron a amenazar al presidente del grupo editorial del que forma parte El Jueves. Por suerte, en ambos casos la gente se puso de nuestra parte y casi que la revista salió reforzada en prestigio y ventas. Las viñetas de La Pandilla Voxura son obra de Salazar y Juanjo Cuerda, genios donde los haya”, indica.

Los siete años en los que estuvo como director, entre 2017 y 2023 los define como una mezcla de resistencia, trabajo y descubrimiento de nuevos autores. “Resistencia porque desde hace décadas la situación de las ventas en los kioscos ha ido decayendo, trabajo por que aumentó el número de páginas y descubrimiento porque pudimos contar con nuevos dibujantes jóvenes y consolidar talentos”.

El exdirector considera que El Jueves ha sobrevivido frente al cierre de otra publicación mítica como es El Víbora, “porque siempre se ha dirigido a un público más amplio, los referentes y los códigos que se manejan los puede entender casi todo el mundo y ha existido una renovación”. En cambio, El Víbora “aunque llegó a ser muy popular para una generación, era más para entendidos. Sobre todo en los 90 cuando la mayoría de las páginas las firmaban autores internacionales”.

Martínez-Vela cree que la irrupción de nuevos medios de comunicación, como las redes sociales ha dado lugar a una persecución judicial, y de ahí “que se haya llevado a los tribunales a gente por hacer chistes, cosa que prácticamente no pasaba desde los años de la Transición”. Particularmente cree que “los chistes son una forma de ficción y la ficción no debería tener límites. Un chiste no es una injuria, no tiene tal poder ni intención. Tampoco es una calumnia, porque es ficción y todo el mundo así lo entiende”.