Exdirigente de ONU dice que con discursos públicos de odio comenzaron las peores tragedias

expresidente del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Fabián Salvioli

24 de marzo 2025/Agencias
El expresidente del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Fabián Salvioli, ha reconocido que le preocupa «muchísimo» la actual situación mundial con «discursos públicos que alimentan el odio y la discriminación», porque «así comenzaron las peores tragedias de la humanidad».

«El Holocausto no comenzó cuando Hitler armó su primer campo de concentración. Comenzó cuando el primer discurso discriminatorio fue aceptado por la sociedad», ha subrayado este ex Relator Especial de la ONU sobre la promoción de la Verdad, la Justicia, Reparaciones y Garantías de No repetición.

Lo ha dicho en declaraciones a los periodistas poco antes de participar en Pamplona en una mesa redonda junto a Eneko Etxeberría, hermano de Jose Miguel Etxeberria ‘Naparra’, desaparecido en 1980, y de la abogada Iratxe Urizar, acto organizado por el Observatorio de Derechos Humanos del País Vasco (GEBehatokia) en el marco del Día Internacional del derecho a la Verdad que se conmemora mañana lunes.

Preguntado al respecto, Salvioli ha señalado que «los derechos están siempre en riesgo en la medida en la que las sociedades no se apropian de ellos. Hoy de nuevo hay a nivel internacional una situación que me preocupa muchísimo, el ascenso a los extremos, el fenómeno el terrorismo, que es execrable siempre y en todo lugar, y discursos públicos que alimentan el odio y la discriminación».

También se ha pronunciado sobre los discursos negacionistas de algunos hechos históricos y masacres, o que ha considerado «una revictimización de las víctimas, en primer lugar, y una mentira inaceptable, absolutamente inaceptable».

«Nadie inventó las cunetas llenas de personas asesinadas en España. Y nadie inventó los campos de concentración en la Argentina. Ha sucedido y hay que hacerse cargo de eso», ha instado.

Sobre el caso de ‘Naparra’, Salvioli ha considerado que «hay una deuda histórica que saldar en los casos de desapariciones forzadas. No son delitos del pasado, porque la desaparición forzada es un delito continuo hasta que la persona aparece o con vida o aparecen sus restos identificados».

También, y en el caso de Euskadi y Navarra, marcadas socialmente por ETA y la lucha antiterrorista, ha apuntado que «debería ser posible» construir una memoria histórica unitaria, pero «la memoria debe ser la memoria de las víctimas. La palabra de las víctimas tiene que ser prioritaria y fundamental».

«La memoria también es una cuestión de futuro. Es decir, implica no olvidar lo que ha sucedido e implica comprender lo que no debe repetirse», ha incidido.

Y sobre la posibilidad de que finalmente se construya una única memoria ha asegurado que algo así «siempre es difícil, pero es posible. Y yo confío en que en que las sociedades darán los pasos de madurez para llevar adelante esto».

«Los derechos humanos no son una cuestión de posicionamientos políticos, son una cuestión que deben ser de Estado. Nadie, absolutamente nadie, puede decir que está en contra de la garantía de los Derechos Humanos, porque es como estar en contra de respirar», ha advertido.

El acto ha contado con la participación de decenas de personas, entre ellas representantes de EH Bildu como Pernando Barrena y Arantza Izurdiaga; Mikel Asiain de Geroa Bai y Carlos Guzmán de Contigo-Zurekin.