Historia de la música ligera. El Rock & roll. Sus comienzos (Capítulo nuevo)

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Juan       Del libro Historia de la música. Autor Juan Pedro calvo

10 febrero / El Diario de Canarias

Cada cierto tiempo, la música ha conocido la evolución de los géneros que se desarrollaban y que daban cabida a nuevos estilos. Todos ellos procedentes de otros que se ha ido desarrollando como precursores de  nuevas formas. De esta forma hemos ido progresando pasando del charlestón y los espirituales al blues, mas tarde al jazz de los 30, posteriormente a la música romántica de los baladistas y las grandes orquestas de genios como Glenn Miller, hasta llegar a los años 40 en que tristemente desaparece el gran  director de orquesta, privando al mundo de uno de sus grandes talentos. De los 40 a los 50, con una guerra por medio se produce un gran  paréntesis en la música, invadiendo las emisoras la música de color fundamentalmente contrarestada por las orquestas y los baladistas de la época. Es aquí donde se produce el gran estallido, la gran sensación, la aparición de los cazadoras de cuero, guitarras eléctricas, gafas de sol, grandes tupes, pantalones ajustados y una manera provocadora de decir las cosas. La música se vuelve ágil y muy rápida.

Sin apenas darse cuenta las emisoras se llenaban de ese nuevo ritmo frenético, cuadriculado y redondo con una fuerte batería que marca el ritmo y una guitarra chillona y endiablada fraseando a lo largo de la canción

Nace el rock, y con él, un estilo de vida, un comportamiento y una forma de manifestarse. El inconformismo de una sociedad americana estancada y acomodada se manifiesta en los sitios más desprotegidos (los barrios bajos), de una manera brutal, sarcástica y llena de intención. La música se unía de una manera vital a lucha por cambiar una sociedad que solo favorecía a unos cuantos.

Quien iba a pensar que aquella música producto de la fusión del folk  de los blancos con el rápido R&B de la música de color, unido a los ritmos sensuales caribeños, traería como consecuencia el portentoso “rock and roll”.

En los albores y principios del rock hay que situar a Fats Domino, el primero que se atrevió públicamente a manifestarse a través de los medios. Tristemente es conocido por su versión de Lady Madonna  de los Beatles que le llevó a la popularidad, pero Fats existían desde mucho antes, con él se produjo el comienzo de todo un movimiento que era algo más que simplemente una representación o audición musical. Para otros el  nacimiento del rock lo sitúan en  Bill Halley y su popular Rock around the clock.

Fats Domino era un roquero de grandes proporciones físicas, que no le permitían excesivos movimientos y que ya en 1948 obtuvo un disco de oro con su tema “Whole lotta lovin”, versionado por grandes bandas de los 60 y setenta, llegando a alcanzar la bonita cifra de 17 discos de oro, esta cifra deja bien claro la importancia de este intérprete en el mundo del rock, tan solo superado por Jerry Lee Lewis y el gran “Elvis”. Otros nombre están tambien en la mente de los buenos aficionados y estudiosos del grandioso rock, nombres tan vitales e importantes como Duanne Eddy,  Chuck Berry, Little Richard, Eddie Conchran, Buddy Holly, Carl Perkins y Gene Vincent.

A lo largo de su historia, desde su nacimiento como movimiento de masas el rock and roll ha sido crucificado y defenestrado en numerosas ocasiones pero siempre resurge de sus cenizas volviendo a primer plano de actualidad. Cada vez que la música atraviesa una mala etapa de falta de imaginación y creatividad, ahí está el viajo poderoso rock and roll para salir del apuro del momento, para tratar de cubrir un hueco que alimente una de las manifestaciones vitales para nuestra vida cotidiana, la música. Casi 60 años de rock and roll son muchos años para un estilo eterno. Como decía Miguelito Rios (alias Mike en otros etapas menos brillantes), “Los viejos rokeros nunca mueren”. En cierta ocasión y a pregunta de los operistas sobre la desaparición del rock Elvis Presley diría: “No creo que muera alguna vez por completo, porque van a tener que hacer algo extraordinariamente bueno para que ocupe su lugar”.

A pesar de la discrepancia de quien fue antes si Fats Domino  o  Bill Haley aquel fabuloso “Rock alrededor del reloj”, estrenado en 12 de abril de 1954, las crónicas sitúan a Fats mucho antes en los chart americanos que Bill, siendo el primero el que recogería los beneficios y las iras que trajo como consecuencia la introducción de este género y que el gran Elvis  convertiría en muchos mas, es decir en la razón contestaría de ser de toda una generación. Era la rebelión de los sin causa.

Es difícil situar en una fecha determinada como nació en propio término etimológicamente del rock and roll, dicen que es una expresión que viene del argot tradicional de los negros para referirse al acto sexual. Todo empezó cuando un popular locutor de radio de Cleveland Alan Freed, en el  año  1952 definió de esta forma “Rock and roll”, a algunas de las  canciones que le llegaban a su programa y como  sabía como clasificar. Era algo nuevo distinto que se le escapaba de las manos y que aún procediendo del R&B, no tenia nada que ver, ni en su forma de interpretar, ni en su contenido, ni en la forma en  la que progresivamente se iba manifestando y desarrollando. Aquello era totalmente diferente.

Mientras los jóvenes blancos bailaban al son de las románticas composiciones de clásicos como Berlin o Gershwin, o de las suaves melodías de crooners como Frank Sinatra, Bing Crosby o Perry Como, los “malos” chicos negros de su generación, hacían mucho más ejercicio con cantantes como Louis Jordan, Fats Domino, Joe Turner o John Lee Hocker, todos pertenecientes a lo que despectivamente se llamaba race music ( música de raza), o también rhythm and blues: bases rítmicas fuertes, descarada incitación al baile y letras directas en las que  se manifestaban sus deseos sexuales sin ambigüedades. Fueron precisamente dos de esas  palabras que los negros utilizaban las que sirvieron de base a la definición de este nuevo movimiento, rock y roll.

Alan Fred, disck jockey progre comenzó a interesarse por esta nueva tendencia y comenzó a dedicar sus programas musicales a  programar los mejores temas de esta música racial con tanto éxito que obtuvo la presentación de un nuevo esacio al que llamó  Rock and Roll Party.

El auge fue tal, fue tan impresionante la aceptación que en 1953, año clave, Fred organizó un multitudinario concierto con algunos de los músicos de sus programas, el lugar elegido fue el Cleveland Arena. El concierto se programa con el nombre de “Moondog ball”. Acudieron al concierto mas 30.000 personas, la mayoría blancos, , algo impensable en aquella época para una reunión musical, fue tal el desconcierto y la afluencia que se tuvo que suspender en previsión de males mayores. Aquello evidentemente, no solo no desanimó a Fred, sino todo lo contrario, ante la realidad del tirón que tenía aquella música de origen negro entre los blancos, dejó pasar u  corto periodo de tiempo, y con mucho mas cuidado, mejor organización y una detallada puesta en escena, se trasladó a Nueva Cork para desde allá explicar la mundo que había nacido el “Rock and roll”.

La cultura de los más jóvenes, con sus problemas, sus desencantos, sus desilusiones, sus exigencias y sus manifestaciones estaba en marcha. Era un movimiento de jóvenes para jóvenes, donde no tenía cabida el mundo de los adultos, estaba hecho para “fastidiar” a los papás. 

La película The Blackboard Jungle («La jungla de pizarra»), que apareció en España con el título de  Semilla de maldad , con un argumento basado en la problemática de los jóvenes, se convirtió en un gran éxito mundial gracias a una canción que definiría ya para siempre el nuevo y creciente movimiento del “Rock and roll”. La cinta empezaba con el famosísimo “Rock around the clock”. Eran tres minutos de explosión, habían nacido los “rebeldes sin causa” y aquel era su himno. El mundo blanco daba paso a un nuevo movimiento social y juvenil cuyo hilo conductor era la música. Su nuevo ídolo era Bill Haley y sus Cometas.

Pero muy pronto se demostró que aquello le venía muy grande a Bill que solo quería cantar y ser un vínculo de conexión musical entre él y el oyente. Liderar un movimiento social era otra cosa y para eso no estaba preparado. Haley tenía 28 años, había nacido en un pueblecito cerca de Detroit y ya era un perro viejo en  la música, conocía perfectamente los entresijos del negocio y cualquier otra situación diferente le asustaba y preusaba, no estando a la altura de las circunstancia, lo que indudablemente lo que quita su enorme facilidad y gran categoría para la composición y representación del rock and roll.

Bill Haley se fugó muy joven de su casa con un amigo y harto de  cantar música vaquera sin que nadie le prestara la mis mínima atención decidió oir con mucha atención aquella música negra loca y desenfrenada, pensando que podría servir como alternativa blanca, eso sí con algunos pequeños e importantes cambios.

Bill Haley continúo cosechando éxitos, pero como músicos profesionales, no representando a ningún movimiento y aunque tocaran rock, su mentalidad estaba mucho más cerca de los grupos tradicionales que de la de las nuevas generaciones.

El rock necesitaba un revulsivo, aquello era insuficiente y los menos optimistas le auguraban y  futuro corto e incierto. Aquel movimiento necesita su líder, alguien que si fuera capas de asumir, no solo la popularidad de cantante innovador, sino alguien que comulgase con las nuevas ideas y con la rebeldía de una nueva juventud naciente, mucho más rebelde y exigente. Elvis estaba a punto de irrumpir en un escenario nuevo para él, impensable y distante, cuando con 19 años como chofer de una furgoneta se ganaba la vida. Para entonces llamaba mucho la atención sus formas y su tupé que ya apuntaban hacia un joven díscolo e inconformista, pero con un encanto natural único.

Con la aparición de Elvis Presley, quedaron fulminados Los Comets con Bill Haley a la cabeza, convirtiéndose en un clásico y reconociéndosele, junto a Fats Domino, la gran puerta que habían abierto. El rock se convertía en realidad.

Donde Haley no daba el tipo, Elvis lo bordaba. Sus fans le llamaban “el rey”, reflejando con ello la realidad de lo que estaba ocurriendo. Llegó además en el momento oportuno, justo cuando los ritmos negros habían llegado a la juventud blanca, pero no existía aún nadie de piel blanca capaz de embriagar en un escenario  con el ritmo, la fuerza y la sexualidad que les salía por todos los poros de su cuerpo a los músicos del ghetto.

Es famosa la frase de un productor norteamericano que manifestó con rotundidad… “Si alguien blanco fuera capaz de transmitir la fuerza de los cantante negros ganaría mil millones de dólares”.

Aunque el rock se convirtió en una manifestación internacional, bien es cierto que en aquellos años estuvo definida por el origen de sus compositores y cantantes, algo parecido  a lo que ocurrió con el jazz. Así aparecieron diversas corrientes. A los Bill haley y sus Comets  con Little Richard se les dijo que representaban al rock de Nueva Orleáns, a Elvis junto a Carl Perkins se les encuadró originariamente en el Rock de Memphis, a Chuck Berry se le asignó la representación de Chicago.

Muy poco durarían estas limitaciones, porque el Gran Elvis se encargaría muy pronto de hacerlo internacional, de proporcionar al mundo un estilo y una manera de vivir que le pertenecía.

Gene Vincent                          

Todos ellos pensaron que cambiarían el mundo, que romperían viajes estructuras, creando sus obras en torno a sus propias convicciones, intentado llevar al público una música vitalista que les motivara y le hiciera mover el cuerpo en las grandes concentraciones e baile. Algo así como el ritmo de moda. Cada uno presentó el rok a su imagen y semejanza, sin seguir unas reglas, tal y como ellos entendían el rock.

Todos ellos prácticamente desaparecieron al finalizar la década de los 60, todos a excepción  de dos, el vibrante Jerry Lee Lewis y el genio, “El Rey”, el gran Elvis Presley. Algunos incluso como Buddy Holly murió al estrellarse en una avioneta en la que viajaba, dejando al mundo del rock sin uno de sus mas grades talentos. Otro de los tristemente desparecidos fue Eddy Cochran (Zapatos de gamuza azul), al derrapar un taxi en Inglaterra. Otros llegaron incluso a pasar una temporada en la cárcel como Chuck Berry, acusado de haber incitado a la prostitución a una menor.  Gene Vincent otro de los grandes murió amargado y solo en la cama de su habitación.

El 5 de julio de 1954, un joven lleno de entusiasmo, chofer de furgoneta, con tan solo 19 años de edad, entraba en un reducido estudio de grabación de Memphis, para registrar varias canciones. Aquello cambiaría el curso de la historia de la música. Con el tema “That’s all right”, nacía “El Rey”, marcando a partir de ese momento el nacimiento de una forma de expresión social y cultural, regalando al mundo un estilo de vida que lo cambiaría. Había nacido, después de los escarceos ya mencionados, el “Rock and Roll”.

 Continuará.  Fin del capítulo