Más de 900.000 niños vulnerables, sin beca de comedor esta Semana Santa
16 de abril 2025/Agencias
Más de 900.000 niños vulnerables de Educación Primaria en España se han quedado esta Semana Santa sin la beca de comedor que reciben cuando van a la escuela y carecen de «alternativas» que garanticen este apoyo en su alimentación en vacaciones.
Así lo denuncia en un comunicado la ONG de educación e infancia Educo, cuya directora general, Pilar Orenes, ha afirmado este martes que «las dificultades económicas de las familias son las mismas ahora que durante el curso escolar» y que sin esta ayuda es «complicado» cubrir su alimentación cuando no asisten a la escuela.
«Es incomprensible que no haya una alternativa que garantice este apoyo en vacaciones, porque siguen comiendo igual que cuando van al colegio», ha asegurado Orenes.
Educo cifra en más de 900.000 el número de alumnos vulnerables que reciben estas ayudas destinadas a sufragar el servicio de comedor escolar en colegios públicos, y recuerda que más de medio millón de niños, el 6,9 %, no pueden comer carne, pollo, pescado o su equivalente en proteínas vegetales cada dos días, según los últimos datos de la Encuesta de Condiciones de Vida.
La ONG lamenta que «es muy difícil saber a cuántos niños» llegan las ayudas comedor, ya que existe una «falta de coordinación» entre administraciones, aunque asegura que, por su trabajo con las familias vulnerables, saben que es «insuficiente».
Por ello, la ONG pide más espacios y actividades «que garanticen la alimentación de la infancia vulnerable durante las vacaciones», ante un problema que se repite todos los años y que se agrava en verano.
“En verano no es una semana, sino 80 días. Mucho tiempo para estas familias, que hacen malabares para llegar a fin de mes y asegurar que sus hijos e hijas coman lo que necesitan”, advierte la directora general.
La ONG subraya que «no solo está en riesgo la alimentación» del alumnado, sino que existen «otras muchas carencias materiales que afectan a su bienestar y desarrollo».
«Llegan la Semana Santa, el verano o las Navidades y muchos se tienen que quedar en casa porque sus familias no pueden permitirse ir de vacaciones ni les pueden pagar otras actividades de ocio. Los hay que viven en pisos pequeños o que comparten vivienda con otras familias. Por eso es muy importante que, además de que reciban una beca comedor, puedan hacer algún tipo de actividad fuera de casa», concluye Orenes.