Más de cien caballos acompañan a San Sebastián en su entrada al mar
21 de enero 2025
El día grande de San Sebastián, co-patrono del municipio, el pueblo adejero regresó a La Enramada para cumplir su compromiso con las tradiciones.
Durante la mañana de hoy, lunes, 20 de enero ha tenido lugar una de las celebraciones más antiguas de la isla, San Sebastián, festividad que data del siglo XVIII en un lugar de culto previo a la Conquista. Con el pasar del tiempo San Sebastián se ha ido adaptando a las nuevas costumbres. A esta improrrogable cita asistieron miles de personas que se congregaron en La Caleta para asistir tanto a la ceremonia litúrgica como a la bendición de animales que se realizó tras la procesión por la playa de La Enramada. En esta edición han participado más de cien caballos que han sido supervisados en todo momento por especialistas veterinarios para garantizar su bienestar.
Los actos en el día grande de San Sebastián (20 de enero) iniciaron a las 12 del mediodía, en la iglesia de San Sebastián y posteriormente, en la playa de La Enramada se desarrolló la festividad la cual según el alcalde del municipio, José Miguel Roodríguez Fraga, “es la fiesta del pueblo, una festividad absolutamente popular, en la que confluyen multitud de personas en torno a un elemento común: San Sebastián”.
El alcalde también explicó que “es una celebración que une dos culturas: la cultura guanche y la de los conquistadores, se sabe que este lugar siempre tuvo importancia, entre otras razones, porque había agua, y aquí se llevaban a cabo actividades fundamentales. El 20 de enero es un día profundamente significativo para toda la gente del sur, con un gran sentido antropológico e histórico. Esta celebración forma parte de nuestra identidad, tanto en lo profundo como en lo colectivo. Además, se entremezcla con las distintas nacionalidades que hoy comparten este espacio y esta fiesta con nosotros. Esto resalta el carácter diverso y rico de nuestra tradición.
Rodríguez Fraga subrayó que “este día es motivo de felicitación y de ánimo para toda la gente que viene a compartir con nosotros. También es un momento para recordar, con especial cariño, a aquellos que no pueden estar aquí. Por eso, mi recuerdo también va para aquellos que están lejos, especialmente para quienes se encuentran en Venezuela, que están pasando momentos difíciles. Sé que, a pesar de la distancia, viven esta fiesta con el mismo entusiasmo”.
Los actos comenzaron con una misa solemne en la iglesia de San Sebastián a las 12:00 horas, seguida por la procesión hacia la playa de La Enramada. Este año participaron más de cien caballos, así como cabras, ovejas, perros, burros, camellos, ponis y aves, todos ellos acompañados por sus dueños y cuidados según las normativas de bienestar animal.
La tradicional entrada de los jinetes al mar, uno de los momentos más esperados, tuvo lugar bajo la atenta supervisión de socorristas, policías y personal sanitario. Tras este emotivo acto, la imagen de San Sebastián fue llevada a la zona de El Humilladero y posteriormente a la plaza que lleva su nombre, donde se realizó la bendición de los animales.
Durante la víspera de ayer (domingo 19 de enero), la celebración incluyó una misa cantada por el grupo “Mesturao”, una pequeña procesión acompañada por la Banda del Patronato Musical de Adeje y la actuación de la Parranda Bentahod.
Los animales protagonizan San Sebastián
Este año, se han inscrito más de cien caballos, numerosas cabras, ovejas, perros, burros, camellos, ponis, aves etc., todos ellos acompañados por las personas propietarias y atendidos debidamente.
Desde la organización se vallaron diferentes zonas para que los animales de mayor tamaño se mantuvieran en condiciones óptimas, bajo la sombra y con provisiones de agua. La organización dispuso de personal veterinario durante toda la celebración para garantizar el bienestar animal en todo momento.
La procesión discurrió por la plaza y se dispuso hasta llegar a la playa de La Enramada, zona en la que los y las jinetes hicieron su tradicional entrada al mar y en la que había presencia de socorristas, policía local, nacional y personal sanitario en todo momento.
Tras hacer su reverencia al mar, como es tradición, la comitiva se dirigió a la zona de El Humilladero. Finalmente, San Sebastián se posicionó en la entrada de la plaza, que también lleva su nombre, para presenciar la bendición de los animales congregados durante este día.
Este año además se ha contado, como viene siendo habitual, con puntos de comida a cargo de las diferentes comisiones de fiestas de los barrios adejeros, además de otras propuestas gastronómicas que han corrido a cuenta por bares y restaurantes que llevan mucho tiempo desarrollando su actividad en Adeje.
La convivencia y la tranquilidad ha sido la tónica de la celebración, todas las zonas ajardinadas fueron habilitadas para que las personas pudieran disfrutar de la fiesta en la que se dieron cita muchas familias, grupos, amistades y personas de todas las edades, procedencias y culturas.
Como viene siendo habitual, se contó con una gran afluencia de personas, así como de ventorrillos y puntos de venta de alimentos y dulces tradicionales en las inmediaciones de la plaza.
Este año, el Mirador de La Paloma fue uno de los lugares más representativos para ver todas las pericias de los caballos y sus jinetes en el mar. Cabe destacar que el Ayuntamiento habilitó, como en las últimas ediciones, una zona reservada para personas de movilidad reducida y/o discapacidad que garantizó la visibilidad y la accesibilidad de todos.
Dispositivo de seguridad
Dada la importancia que tiene esta festividad local a la que cada año asisten numerosas personas, el Ayuntamiento dispuso de un amplio dispositivo de seguridad para el buen desarrollo de la fiesta, en el que participaron Policía Local, Nacional, Guardia Civil, Policía Canina, salvamento, socorrismo, Protección Civil, ambulancias, además de un conjunto de trabajadoras y trabajadores públicos.
Para garantizar la seguridad de la ciudadanía, el Ayuntamiento delimitó una zona de aparcamientos, dejando libres las vías principales de circulación para una mejor fluidez tanto peatonal como del tráfico rodado. También se dispuso de una zona acordonada y preparada para la colocación del ganado que participó en la procesión.
Asimismo, se delimitó todo el recorrido tanto de los animales como de la procesión y se dispuso de personal veterinario para garantizar el bienestar animal
El consistorio desea felicitar el comportamiento de la ciudadanía ya que no se registró ninguna incidencia que lamentar. Asimismo, reconocen la responsabilidad que tuvo la ciudadanía con respecto al cuidado de sus mascotas.