Natalia Santana denuncia que el proyecto de decreto para reconocer la dependencia es un atentado

27 de Abril 2024

La diputada de NC-BC pide explicaciones a Candelaria Delgado por la petición de dimisión de la directora general ante su “incapacidad” gestora y “nefasto” liderazgo

Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) considera que el proyecto de decreto del Gobierno de CC y el PP para reconocer la dependencia y el derecho a las prestaciones y servicios es un “atentado” que la diputada canarista Natalia Santana ha tratado de corregir con alegaciones. La portavoz parlamentaria pidió explicaciones a la consejera de Bienestar Social, Candelaria Delgado, por la petición de dimisión de la directora general de Dependencia, Concepción Ramírez, por parte de los comités de empresa de ambas provincias. La portavoz sectorial canarista trasladó las denuncias de los “malos modos y formas” de la responsable gubernamental cuestionada, lo que “no ha pasado en 17 años”, fruto de su “incapacidad de gestión y liderazgo nefasto”.

Durante la comisión sustanciada en el Parlamento, Natalia Santana denunció que el proyecto de decreto que regula el procedimiento para el reconocimiento de la situación de dependencia y del derecho a las prestaciones está “lleno de medidas que atentan” contra los equipos técnicos y los interesados. La diputada de NC-BC se mostró asombrada porque Delgado haya sacado adelante “semejante atentado”.

Muchos de los aspectos introducidos en el procedimiento, tal y como se recoge en las alegaciones registradas por NC-BC, “no garantizan el derecho al reconocimiento de la dependencia ni el acceso a las prestaciones”. Se refiere, entre otros, a la “indefensión y la falta de garantías” dentro del procedimiento ante cualquier imprevisto que se le pueda presentar al solicitante el mismo día de la cita sin posibilidades de que pueda ser notificada con anterioridad.

Para NC-BC se establecen unas excepciones “poco concretas y objetivas” que pueden crear diferencias “significativas” en el tiempo de resolución de las resoluciones. Existen contradicciones entre el proyecto de borrador y la ley que regula la dependencia y el plazo de un mes, para acceder a las prestaciones, es “muy exiguo”, y más cuando se pueden producir circunstancias ajenas al solicitante.

Santana defiende que, cualquier modificación de los procedimientos para el reconocimiento de la situación, debe tener en cuenta la opinión de los comités de empresa de las valoradoras. También que se reduzca el tiempo medio de espera desde la solicitud y el acceso a los servicios, que en la actualidad está en 330 días e incumple los plazos fijados por la ley.

La reducción de las listas de espera, para NC-BC, debe realizarse con todas las garantías y las medidas de mejora del sistema de reconocimiento deben conllevar una mejoría de las prestaciones.

La parlamentaria canarista recriminó a Delgado que no escuche las reivindicaciones de los equipos humanos y profesionales del área y que les dé la espalda por las denuncias referidas a la gestión de la directora general.

Natalia Santana insistió a la responsable de la consejería, de forma reiterada, para que “escuche” a los representantes del personal que solicitan la dimisión de Concepción Ramírez por, con palabras textuales de los comités de ambas provincias, la “incompetencia demostrada para trabajar en coordinación con los y las trabajadoras, acatar y transmitir las órdenes superiores, así como evaluar las acciones llevadas a cabo con el fin de revertir el caos actual que se ha producido”.

La gestión de esta área, remató la portavoz sectorial del grupo canarista, “no funciona…no va bien encaminada”. Santana observó que los sindicatos, el Diputado del Común y los trabajadores también hacen las mismas críticas.

Se trata, continuó, de una directora general que los sindicatos denuncian por sus “malos modos y formas”. Solicitan su dimisión, “lo que no ha ocurrido en 17 años”, añadió. Fruto de la “incapacidad” gestora y “nefasto” liderazgo, criticó. Un sinfín de quejas, prosiguió Natalia santana, que generan “tensión, ansiedad y, lo que es peor, un colapso” en la atención y el área, en general.