Picardo dice que España mantiene posiciones que Gibraltar no puede aceptar
10 de Octubre 2024/Agencias
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, ha dicho hoy que en las negociaciones para lograr un acuerdo sobre el encaje del Peñón tras el brexit, España mantiene posiciones que Gibraltar no puede aceptar.
En unas declaraciones difundidas a los medios, Picardo no precisa cuáles son esas posiciones que no puede aceptar, dentro de unas negociaciones que se llevan con gran sigilo por todas las partes.
El ministro principal de Gibraltar ha difundido estas declaraciones después de que el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, dijera, tras una reunión mantenida hoy con los ocho alcaldes del Campo de Gibraltar y autoridades de la Junta de Andalucía, que espera que el Reino Unido acepte el acuerdo sobre Gibraltar antes de que entren en vigor los nuevos controles dentro del espacio Schengen, en principio el próximo 10 de noviembre.
«Llevamos muchos años negociando este acuerdo, soy el cuarto ministro de Exteriores que lo negocia y ya es hora de que Reino Unido diga que sí a un acuerdo que es equilibrado y generoso», ha subrayado Albares, que ha recordado que lo que propone España es la inclusión de Gibraltar dentro del Espacio Schengen, al amparo de España ya que Reino Unido no pertenece a este espacio de libre circulación de personas y mercancías, con lo que la Verja se eliminaría y las fronteras se ubicarían en el puerto y el aeropuerto del Peñón.
El hecho de que agentes españoles serían los encargados, según los usos de Schengen, de hacer los controles de accesos en el aeropuerto y el puerto de Gibraltar se ha apuntado como uno de los aspectos de fricción en las negociaciones.
Albares ha advertido de que es el Reino Unido «el que tiene que decidir si prefiere eso» o que a partir del 10 de noviembre comiencen a funcionar los nuevos controles de accesos en todo el espacio Schengen.
Picardo lo ha puesto en cuestión al afirmar que Gibraltar «ha puesto sobre la mesa acuerdos de compromiso que respetan las posiciones históricas de todas las partes y garantizan la seguridad del Espacio Schengen y la integridad del Mercado Único».
«España tiene que decidir si acepta estas propuestas razonables y bien equilibradas o si insiste en posiciones que saben que no podemos aceptar y, de ese modo, nos condena a todos a controles que harán más difícil la vida de los trabajadores y de la ciudadanía en general», continúa.
«Sigo siendo optimista y espero que nuestras propuestas razonables, o una derivación de ellas, puedan funcionar para todas las partes», ha añadido Picardo.