Puigdemont reprocha a Illa sus «genuflexiones» ante el rey para aparentar «normalidad»

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14 de Octubre 2024/Agencias
El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha reprochado este domingo al actual presidente catalán, Salvador Illa, sus «genuflexiones» ante el rey Felipe VI para aparentar una «normalidad» en Cataluña que, en realidad, supone «dependencia de España».

A través de un mensaje en la red social X, Puigdemont se ha hecho eco de los nuevos cortes en el servicio de Cercanías de Renfe debido a varias averías.

«Esta es la normalidad que pregonan los ‘dependentistas’ que hoy mandan en España, Cataluña y Barcelona. La normalidad que comporta la dependencia de España. Llevan décadas y décadas gestionando nuestros trenes, y esto es todo lo que nos pueden ofrecer… mientras nuestros recursos se van a pagar las rebajas fiscales y las inversiones extraordinarias en Madrid», ha denunciado.

Puigdemont ha retado a Illa -a quien ha atribuido el irónico cargo de «presidente del Govern de la Normalidad de Cataluña»- a hacerse oír para denunciar esta situación.

«¿O quizá aún cree que los trenes de los catalanes mejorarán yendo a los desfiles militares del nacionalismo español y haciendo genuflexiones al rey? ¿O predicando que ‘Cataluña ha vuelto’ (que en realidad quiere decir que ‘ha vuelto a resignarse y a quedarse en casa’ y a no incomodar la normalidad del sistema autonómico en el que a nosotros nos toca pagar y callar?», se ha preguntado.

Puigdemont ha aludido así a la asistencia de Illa a los actos de conmemoración de la Fiesta Nacional del 12 de octubre en Madrid, después de catorce años de ausencia de representantes de la Generalitat en el desfile del 12-O y la posterior recepción del rey.

Para revertir la precaria situación de Cercanías, ha recalcado que «hace falta un gobierno que no dependa de los intereses del partido del Gobierno español, y hacen falta diputados en Madrid que no aprueben las cuentas si no se ha cumplido con Cataluña».

Esa es, ha dicho, «la única manera de que los trenes dejen de fallar más que una escopeta de feria».