Rivero ve «muy complicado» el modelo de gestión del Tenerife, pues genera «controversias»
06 de Septiembre 2024
El presidente del CD Tenerife, Paulino Rivero, ha asegurado este jueves que el modelo de gestión del club es «muy complicado» y «sin parangón en España», pues la intervención de la propiedad en el mismo genera «interferencias» y «controversias».
En una entrevista en Radio Club Tenerife, Rivero ha subrayado que «el problema» en la entidad blanquiazul «no tiene que ver con quiénes son los propietarios» sino con ese modelo de gestión por el que optaron los sindicados, que delegaron la parcela deportiva en el máximo accionista, José Miguel Garrido.
Ha hecho hincapié en que la atención debe centrarse en la parcela deportiva y ha dicho que «las sensaciones» que ha transmitido el equipo de Óscar Cano en las tres primeras jornadas del campeonato han sido positivas, excepción hecha del «pésimo» partido contra Eldense.
Ahora bien, ha dicho hacerse cargo de que existe «mucho ruido» alrededor del CD Tenerife por «algunas cuestiones del entorno del club no han sido nada positivas, algunos mensajes, actuaciones, expresiones públicas que no han venido nada bien».
Con todo, ha asegurado que el consejo de administración «funciona sin ningún tipo de problema, de forma normal y sin discrepancias internas».
Lo que no le convence al presidente del CD Tenerife es «el modelo por el que han apostado los accionistas, que desde el inicio percibía que es muy difícil de gestionar».
Ha recordado que los tres equipos que subieron a Primera la pasada temporada, Espanyol, Valladolid y Leganés, tienen de propietarios a sendos grupos chino, brasileño y estadounidense, pero en todos ellos la gestión, el día a día, está encomendada a los administradores y empleados de la casa.
En el Tenerife, ha continuado Rivero, el sindicado de accionistas mayoritarios apostaron por un modelo de gestión en el que los poderes deportivos los depositaron en Garrido.
Preguntado por filtraciones y por determinados comportamientos de miembros del club, el presidente blanquiazul se ha reafirmado en que se trabaja para «intentar ponerle orden a algunas cuestiones» mediante una actualización del código ético de la entidad.
«La otra opción» que queda, ha continuado Paulino Rivero, «es la ruptura, lo que dañaría al club. Hay una cosa por encima de los accionistas, del consejo, del presidente, de todos, que es el Tenerife», ha señalado, y ha añadido que esto «no quiere decir miremos a otro lado y no intentemos poner coto a situaciones atípicas».