Sindicatos avisan de que las movilizaciones para reducir la jornada despiertan «simpatía»

UGT

23 de Julio 2024/Agencias
Los sindicatos han advertido este lunes a la patronal de que el proceso de movilizaciones que han anunciado para que instar a que se apruebe la reducción de jornada laboral «cuenta con una simpatía inmensa de la sociedad española».

En declaraciones a los medios este lunes, los secretarios generales de CCOO y UGT han dejado clara su intención de llevar a cabo movilizaciones en septiembre si no hay avances en la mesa de diálogo social que negocia los términos de una reducción de jornada que debe situarla en las 37,5 horas semanales en 2025.

El líder de UGT, Pepe Álvarez, ha pedido a la patronal que sea clara sobre su voluntad de negociar y no haga perder el tiempo, al tiempo que ha asegurado que esta medida despierta la simpatía de la sociedad española y ha confiado en que no se utilice como «un elemento del ‘pimpampum’ de la política».

«Los sindicatos queremos que este debate se lleve a cabo mirando a los ojos de los trabajadores con jornadas de 40 horas semanales», también por parte de los grupos políticos, que deben saber «que su voto se dirimirá en función de una cuestión que no es menor», ha dicho Álvarez.

Asimismo, ha explicado, durante una rueda de prensa sobre el despido, que la reducción de jornada afectará principalmente a aquellas empresas y sectores que no están amparados por la negociación colectiva.

Habrá movilizaciones «salvo milagro»
«No todo vale para que el acuerdo sea tripartito», ha advertido el secretario general de CCOO, Unai Sordo, que ha añadido que «salvo milagro» habrá movilizaciones en septiembre a favor de la reducción de la jornada.

Tras reunirse con el coordinador federal de IU, Antonio Maillo, Sordo ha asegurado que si se reduce la jornada laboral «no va a pasar nada», ni va a ser «una hecatombe» como pronostican los empresarios, que ya auguraban que se destruiría empleo si se subía el salario mínimo y el mercado laboral tiene una ocupación récord por encima de los 21 millones de afiliados.

«En España lo que tendría que estar en disputa es si se favorecen los sectores cuyas empresas van a ser rentables por mejorar cómo se trabaja y no los sectores cuya rentabilidad va a depender de que lo que se trabaja sea pagando poco, precarizando mucho y con jornadas extenuantes», ha afirmado.