Xi viaja a Kazajistán para asistir a la cumbre de la OCS y potencial reunión con Putin
02 de Julio 2024/Agencias
El presidente chino, Xi Jinping, viaja este martes a Kazajistán, donde participará en la cumbre de los líderes de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), que se celebrará el 3 y el 4 de julio y en la que se espera que se reúna con su homólogo ruso, Vladímir Putin.
Durante el evento, Xi «mantendrá un intercambio de puntos de vista con los líderes de los países participantes sobre la profundización de la cooperación entre ellos, así como sobre los principales asuntos internacionales y regionales», señaló este lunes en una rueda de prensa la portavoz de la Cancillería china Mao Ning.
La OCS, organismo creado para la colaboración en seguridad regional o la lucha contra el terrorismo, el separatismo étnico y el extremismo religioso, está integrada por China, India, Irán, Kazajistán, Kirguistán, Pakistán, Rusia, Tayikistán y Uzbekistán, y se espera que Bielorrusia se convierta en su décimo miembro en el marco de esta cumbre, que tendrá lugar en Astaná.
Tras el encuentro, China asumirá la presidencia de la OCS hasta 2025 con el objetivo de «realizar contribuciones a una paz duradera y la prosperidad común en el mundo» y «beneficiar a la región», según Mao.
¿Nueva reunión con Putin?
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, avanzó en mayo que Xi y Putin se reunirían en Kazajistán en los márgenes de la cumbre de la OCS, el que sería su segundo encuentro en aproximadamente dos meses, después de que el líder ruso visitase China a mediados de mayo.
Durante sus cara a cara en China, los dos mandatarios exhibieron consensos en torno a asuntos globales como los conflictos de Ucrania y Gaza, la multipolaridad y el comercio, marcando distancia con las posturas occidentales.
Xi y Putin hicieron hincapié entonces en que «una solución política a la ‘crisis’ en Ucrania es la dirección correcta» y en la «extrema urgencia de hallar una salida para la situación en Palestina».
El momento en el que se producen la cumbre y la probable reunión entre Xi y Putin, según analistas chinos citados por el rotativo Global Times, es «especialmente oportuno dados los drásticos cambios en la situación internacional y la intensificación de la contención y la confrontación entre bloques instigada por los países occidentales».
«Envía un mensaje al mundo occidental de que hay muchas voces de las economías emergentes que necesitan ser escuchadas y representadas, y que la tendencia dominante de la cooperación mundial no se invertirá por su obstrucción», declaró el investigador Zhou Rong al diario.
Visita oficial a Kazajistán y Tayikistán
En el marco de su desplazamiento a Kazajistán para participar en la cumbre, Xi también efectuará una visita de Estado a ese país y a Tayikistán.
Kazajistán «se presenta como un vecino amistoso y socio estratégico integral y permanente de China» y las relaciones entre ambos países «han mantenido un impulso de desarrollo saludable y estable», señaló este lunes Mao.
El ministro de Exteriores kazajo, Murat Nurtleu, dijo en mayo a su homólogo chino, Wang Yi, que China y Kazajistán «comparten posiciones similares en muchos temas de la agenda internacional y regional».
Será la quinta visita de Estado a Kazajistán que realice Xi, que se desplazará después a Tayikistán, «un vecino amistoso y un socio estratégico integral de China», según la portavoz de la Cancillería.
El año pasado, Xi recibió a los líderes de los cinco países exsoviéticos de Asia central – Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán – en la ciudad china central de Xian, donde se comprometió a ofrecer apoyo económico, de infraestructura y de seguridad a la región.
En los últimos años, China ha fortalecido sus lazos con Asia Central, una región vasta y rica en recursos que China considera crucial para la expansión de las rutas comerciales y la seguridad energética, así como para mantener la estabilidad en su región occidental de Xinjiang, donde viven numerosas etnias minoritarias de religión musulmana.
Sin embargo, la influencia china en la zona choca con Rusia, que mantiene en la región cierto poderío tanto desde el punto político como económico y militar con alianzas y bases en Kirguistán y Tayikistán.